Antes de empezar a escribir este artículo, no dedicaba mucho tiempo a pensar en el agua. Sabía que beber agua es algo bueno, y que beber agua con carbón activado puede ser algo malo. Pero si me preguntabas la diferencia entre el agua mineral y el agua normal. No tenía ni idea.
Es bastante obvio que el agua mineral es, bueno, agua con minerales, pero ¿Qué minerales? ¿Acaso no tiene minerales toda el agua? Resulta que algunas personas sí saben lo que es el agua mineral. Esa gente es la FDA, que regula el agua embotellada. Dicen que las aguas minerales naturales deben contener al menos 250 partes por millón (ppm) de «sólidos disueltos totales», procedentes de «una fuente de agua subterránea geológicamente y físicamente protegida». En otras palabras, las aguas minerales tienen que salir así de la tierra.
El agua mineral suele contener sustancias como el magnesio, el calcio, el sodio y el zinc y, según investigaciones recientes, es una forma bastante eficaz de aumentar la ingesta de minerales. Un estudio reciente ha descubierto que el agua mineral tiene algunos beneficios legítimos para la salud.
En esencia, el agua mineral proporciona minerales que el cuerpo humano no puede crear por sí mismo. Aunque no es necesario que bebas aguas andinas Melipilla para obtener tu dosis diaria recomendada de magnesio, esas caras botellas son un método legítimo de consumo.
El estudio reciente demostró que la biodisponibilidad del calcio en las aguas minerales era comparable o posiblemente mejor que la de los productos lácteos, lo que significa que nuestro cuerpo puede absorberlo y utilizarlo fácilmente. Además de promover el desarrollo saludable de los huesos, el estudio también señala beneficios significativos para una digestión saludable gracias al sulfato de magnesio, el sulfato de sodio, el bicarbonato y el cloruro.