No hace falta ser una rata de gimnasio para saber que la ropa de entrenamiento requiere un cuidado especial de limpieza. A menudo hecha de materiales que absorben el sudor como la lycra, el spandex y el poliéster, no es raro que nuestra ropa de ejercicio -incluso la de algodón- se vuelva (y se quede) apestosa, pero no te preocupes: hay nueve cosas que puedes aprender sobre cómo lavar tu ropa de gimnasio para resolver tus problemas de mal olor.
Para ayudarte a cuidar mejor de tu querida ropa de gimnasio, hemos desglosado algunas de las mejores cosas que puedes hacer para mantener tu ropa de entrenamiento fresca durante más tiempo. Desde baños de vinagre hasta detergentes especialmente formulados, aquí tienes siete cosas de Halcon Tiendas de deporte que probablemente no sabías sobre cómo lavar tu ropa de deporte:
1. Debes dejar que la ropa respire antes de lavarla
Aunque lo primero que se te ocurra es enterrar la ropa de gimnasio maloliente en el fondo del cesto, dejar que se airee antes de lavarla hará que sea mucho más fácil limpiarla. Cuando te las quites, cuelga tus prendas de entrenamiento sucias en algún lugar donde puedan secarse (lejos de la ropa limpia) para que eliminar los olores a la hora de lavarlas sea pan comido.
2. El remojo previo en vinagre ayuda
Un poco de vinagre puede ayudar mucho a la hora de lavar la ropa del gimnasio. Si la ropa huele especialmente mal, sumérjala en media taza de vinagre blanco mezclado con agua fría durante al menos una hora antes de lavarla. Esto ayudará a eliminar los malos olores y a deshacer las manchas de sudor y la acumulación de suciedad.
3. Lava tu ropa de gimnasio en agua fría
Lo creas o no, el agua caliente puede dañar tu ropa sucia del gimnasio más de lo que podría ayudar. El calor extremo en realidad puede romper la elasticidad de los textiles elásticos, como el material de tus pantalones de yoga y pantalones cortos para correr, lo que lleva a un encogimiento y una vida útil más corta para tu ropa.
4. Tampoco las seques a máquina
Al igual que el agua caliente puede perjudicar la longevidad de tu ropa de gimnasio, lo mismo ocurre con el aire caliente. Así que en lugar de secar tu ropa de deporte a alta temperatura en la secadora, considera la posibilidad de secarla al aire en una percha especial o en un perchero, o al menos utiliza el ajuste de calor más bajo posible.
Resulta que el suavizante -tanto en forma líquida como en hojas para secadora- puede dañar los tejidos elásticos y crear una capa en la ropa que atrapa los olores, así que por el bien de tu ropa de gimnasio, evítalo a toda costa. O prueba un potenciador de aclarado como este de Dirty Labs para ropa deportiva diseñado para sustituir a los suavizantes y reducir la adherencia estática.
6. Lavar del revés
Probablemente ya sabías que lavar la ropa del revés ayuda a proteger los colores, pero también puede dar a tus prendas más sucias -también conocidas como prendas deportivas- una limpieza más profunda en la lavadora. Teniendo en cuenta que el interior de la ropa es donde se acumulan todas las bacterias corporales asquerosas (¿alguien quiere manchas en las axilas?), si pones tu ropa de deporte del revés antes de lavarla, conseguirás una limpieza más directa y profunda.
7. Prueba un detergente especialmente formulado para el deporte
Los detergentes específicos para ropa deportiva existen por una razón. Especialmente formulados con productos naturales que combaten los malos olores para limpiar en profundidad los tejidos que absorben la humedad y los materiales sintéticos, detergentes como Hex Performance, Rockin Green Platinum Powdered Detergent y The Laundress atacan directamente a las bacterias que crecen en la ropa del gimnasio, eliminando la verdadera fuente de los malos olores (y las posibles manchas que dejan).